Veamos.
No fui a ver a El Otro Yo por razones ajenas a mi persona. Ni modo; es de mis cinco bandas favoritas y me enojé demasiado, pero lo pude superar después de un tiempo.
Después, el puto torneo nacional de Tae Kwon Do para el que había estado entrenando todo el año, se empalmó con el concierto de Smashing Pumpkins. ¿Qué podía hacer?
Ayer me enteré que se canceló el concierto de Misfits al cual planeaba ir. Rayos. No importa, no era la gran cosa.
Ahora, hace unos momentos, me enteré de que Muse, la banda que más he escuchado últimamente y admiro por su estilo tan original, vendrá a Monterrey. Emoción. El 16 de Junio. Eso podía sanar parcialmente las heridas anteriores. Me puse a buscar más información sobre dicho concierto en Google. Al parecer sería el 16 de Julio, no Junio. Pero… ¡esos días estaré en Alemania! Maldita sea. NO PINCHE MAMES. Sólo puedo hallar una palabra para acercarse un poco a describir lo que esta situación es: CAGANTE. Así mismo, con mayúsculas, pues las minúsculas no expresan tanto énfasis como este escenario es para mí. Espero que sea en Junio, pero lo dudo. Esto, por más estúpido que suene, va a afectar mi autoestima por unos días o algo por el estilo. Si estuviera en mis manos, no iría a Alemania. Tanto así quiero verlos. Pero sé que no sucederá, mis papás no me dejarían hacer tal cosa, además de que ya está pagado todo el viaje y demás.
Y pues, me despido, cagadísimo. PUTA PINCHE MADRE